Blue sunshine (1976)

Hola de nuevo a tod@s, tras unos cuantos meses de inactividad en el blog, vuelvo a ponerme manos a la obra, con muchas ganas de seguir ofreciendo mis pensamientos sobre aquellas películas que voy descubriendo, intentaré a partir de ahora actualizar el blog mucho más a menudo, y como siempre estoy ansioso por recibir todo tipo de comentarios por vuestra parte, ya que en mi opinión es la interactividad con sus lectores lo que realmente le da vida a un blog.

Para hoy tenemos una película de la que a priori esperaba bastante más, la carátula del DVD me había conquistado, y el título, que no deja entrever nada de su contenido (hasta que vemos el filme) también me había llamado la atención. Pero eso es todo, la cosa se queda en un atractivo envoltorio, pero cuyo contenido se tambalea más que una mesa de tres patas durante la mayoría del metraje.


Y digo durante la mayoría, porque el arranque de la película resulta cuanto menos prometedor, e incluso llega a resultar bastante interesante. Comenzamos con unos largos títulos de crédito (unos siete minutos) en los que se combina la presentación de algunos de los personajes con una imagen fija de la luna llena, lo cierto es que resultan originales.

En un principio puede parecer que la combinación de dichas imágenes no guarde ninguna relación entre sí, pero el director quiso incluir esas imágenes de la luna llena para representar el comportamiento lunático de los mismos personajes a los que está mostrando en el inicio, algo que entenderemos conforme avance la trama.


Una trama cuyo planteamiento inicial, como ya hemos comentado, resulta bastante aceptable en su origen, y que consigue mantener la atención hasta que vamos descubriendo las incógnitas que se plantean. Resulta que una serie de personas comienzan a sufrir unas fuertes jaquecas, acompañadas de una repentina alopecia total, lo que les produce un grave trastorno en su comportamiento, que tiene como resultado último el asesinar a todo aquel que se cruza en su camino.


El protagonista es amigo de uno de los afectados, y tras su muerte comienza a investigar que se esconde tras esa extraña conducta. Sus pesquisas le llevan hasta el nombre de “Blue Sunshine”, algo que luego descubriremos que se trata del causante de toda esta serie de extraños y macabros sucesos. No os desvelaré qué es “Blue Sunshine” ya que es lo único que mantiene algo de interés sobre la trama, así que es mejor que lo descubráis por vosotros mismos si decidís ver el filme.


El desarrollo posterior del argumento resulta bastante pesado, y las buenas maneras iniciales se pierden por el camino, dando como resultado un filme muy mediocre, que no sabe como resolver su trama de forma sensata, y que se enreda en una serie de situaciones algo inconexas. Tampoco ayuda a realzar el filme el elenco de actores que pasan por la pantalla sin pena ni gloria, especialmente al protagonista lo encuentro totalmente sobreactuado.


Para entender la escasa calidad del conjunto resulta importante señalar, que en un principio este producto nació con la intención de ser una TV-movie, pero finalmente su director decidió que podría resultar conveniente estrenarla en cines.

En resumidas cuentas, un filme del montón, del que lamentablemente no se puede destacar nada.

C.H.U.D. (1984)

Vamos a seguir hoy de nuevo con una de esas películas ochenteras que a mí tanto me gustan. Me imagino que os estaréis preguntando que demonios significan las siglas que componen el título de la película que hoy nos ocupa, pues bueno os lo digo ya, pero no os asustéis ¿OK? El título es el acrónimo ni más ni menos que de: "Cannibalistic Humanoid Underground Dweller”, o como fue traducido al español: “Caníbales Humanoides Ululantes Demoníacos”, como veis el título es sin duda ya de por sí toda una joya, digna de admiración y respeto, y es que no me podéis negar que hacen falta un par de cojones para ponerle ese título a una película, pensando en atraer al público hasta el cine, pero bueno como ya he dicho muchas veces los 80 eran otros tiempos…

Por cierto ¿alguien me puede decir que coño es un caníbal ululante? En el Word, me da “ventoso” como sinónimo de “ululante”, ¿quiere esto decir, que los monstruos que aparecen en la película, además de ser caníbales, humanoides y demoníacos, tenían problemas de gases? Aunque pensándolo un poco, no me extraña tanto, siendo caníbal, y con lo podrida que está la humanidad hoy en día…


La película como ya os estaréis imaginando deja bastante que desear, si bien es cierto que se deja ver sin problemas, yo la verdad es que con ese título me esperaba algo mucho peor. El argumento resulta sencillo, en la ciudad de Nueva York (donde sino) comienzan a producirse misteriosas desapariciones en serie, algo que los superiores del departamento de policía tratan de suavizar de cara a la población.


Pero un buen día desaparece la mujer de uno de los inspectores encargados del asunto, por lo que decide comenzar a investigar con mayor profundidad. Descubre que muchos de los desaparecidos son indigentes que malviven en el subsuelo de la ciudad, por lo que es por ese camino por el que centra su investigación.


Paralelamente, un fotógrafo que había conseguido su gran éxito gracias a un reportaje sobre esos habitantes del subsuelo, comienza a involucrarse también en el asunto. El policía a su vez se hace con la ayuda de un reverendo que se dedica a ayudar a los indigentes y que también está interesado en buscar una explicación a las desapariciones.

Poco a poco descubren que dichas desapariciones se deben a que en las profundidades del alcantarillado de la ciudad habitan unos horripilantes seres caníbales (y ululantes, no lo olvidemos) que necesitan atrapar a incautos humanos para alimentarse.


Más tarde descubrimos que esos seres, eran antes algunos de los vagabundos que sobreviven allí, y que deben ahora su existencia a una serie de productos tóxicos que habían sido almacenados en las profundidades de la ciudad por el gobierno, lo que les había hecho mutar y convertirse en horrendos monstruos ululantes, los cuales ahora el gobierno no quiere que salgan a la luz, ya que la opinión pública se les echaría encima, por lo que tratan de tapar el asunto a toda costa.


Como vemos la película lanza un mensaje ecológico y reivindicativo, en contra de los productos nucleares y tóxicos, algo muy común en los 80, y que se refleja en multitud de películas de esa década, como esta que nos ocupa, o por ejemplo la serie de filmes de “El vengador tóxico” entre otras.

La película imagino que contó con un pequeño presupuesto, y es algo que lógicamente se nota, tanto en los medios técnicos como artísticos. Por ejemplo, los monstruos salen en contadas ocasiones, y cuando lo hacen, apenas podemos ver de ellos sus brazos, y algunas veces sus cabezas, seguramente no había presupuesto para más. Además las pocas veces que aparecen de cuerpo entero, la escasa iluminación se ocupa de ocultar su fisonomía al espectador, por lo que no sabemos muy bien como es el resto de sus cuerpos.

Mención aparte merece la calidad sonora del filme, que es de juzgado de guardia, y entre otras lindezas encontramos molestos chisporroteos, saltos bruscos de volumen cuando se produce un cambio de escena, disparos que no se escuchan, etc.


Cabe también destacar la presencia de algunos actores reconocibles, como John Heard, Daniel Stern, o una breve aparición del bueno de John Goodman.

En fin, que os voy a decir ya a estas alturas que no sepáis, una película cuyo visionado (o no visionado) no marcará vuestra existencia, pero que se puede ver perfectamente, y más si como yo disfrutáis con el encanto incomparable del cine de los 80.

La mujer explosiva (1985)

No se muy bien que decir de esta película, de la que no había oído hablar nunca hasta ahora (y la verdad es que una vez vista no me extraña en absoluto…), y de la que realmente poco se puede decir.

Empezaré por contaros un poco su argumento, podéis leer tranquilamente, porque aunque os desvele un poco de qué va la cosa, no creo que veáis la película jamás en vuestras vidas; puede que algún día por casualidades de la vida, ó porque no hagan nada mejor en la TDT (raro sería, ya que incluso una partida de esas que ponen a veces de póker mantiene más el interés), o simplemente porque vuestro instinto audiovisual masoquista (que dudo que esté tan desarrollado como el mío) os lo pida, lleguéis a ver esta película, bueno mejor matizo: puede que lleguéis a “comenzar a ver” esta película, lo que realmente dudo es que la terminéis de ver.


Por ello, en un acto totalmente desinteresado y altruista (no hace falta dar las gracias…) voy a compartir con vosotros el argumento, y lo que es mejor el desenlace (que es digno de comentar) de esta, por llamarla de algún modo, “curiosa” película.

Realmente, aunque no me creáis, si con esto evito que alguna alma cándida, de entre vosotros mis fieles y queridos lectores dañe su cerebro con el visionado de este filme, me sentiré feliz, y podré pensar que estoy haciendo un gran bien a la humanidad, y tan solo me quedará esperar que cuando me llegue “el momento” (que poético suena eso de “el momento” ¿verdad?) el bueno de San Pedro (que no León…) me guarde un rinconcito a su vera, salvándome así de las llamas eternas del Averno, a las que hasta ahora estaba condenado, por (entre otros motivos) perder una importante parte de mi vida consumiendo cine de serie B, Z, o si alguien conoce alguna letra más allá de la Z que me la diga, porque de ese tipo de cine también he visto...


Bueno, total que la cosa, va de dos chavales, los típicos perdedores del instituto, a los que las tías ven como dos mocos en movimiento, que buscan hacer realidad sus sueños de adolescente salido, que claro esta, no son otros que estar con un tía, para ello, se les ocurre la brillante idea (tras ver Frankenstein en televisión) de crear una tía mediante la ayuda del ordenador de uno de ellos, al que conectan además una muñeca Barbie, con lo que realmente no se sabe muy bien lo que pretenden las calenturientas mentes de los chavales.


Total, que como era de esperar, algo extraño pasa, se produce una explosión, y la chica que habían creado por ordenador, aparece de carne y hueso en su habitación, para palabras textuales “satisfacer todos sus deseos”, si lo pensamos fríamente llegados a este punto, lo mejor habría sido tomar otro camino, y dirigir la película hacia otro género, llamémosle… ¡porno!, en lugar de comedia adolescente, y seguramente la película habría ganado en interés, ya que al menos la chica es una belleza de la época (Kelly LeBrock), aunque hoy en día la saludable dieta norteamericana parece no haberle sentado excesivamente bien…


A partir de ese momento, en la película se suceden toda una serie de escenas sin sentido ni gracia alguna, que realmente no llevan al filme hacia ningún lado, es como ver una recopilación de imágenes de “Vídeos de primera”, en los que uno no guarda relación alguna con el anterior, y cuya supuesta comicidad es nula.


Pues así pasamos una hora y poco hasta llegar al final de la película que es realmente “lo mejor”, y donde podemos apreciar en toda su magnitud la enorme “calidad” del guión. Espero que mi sarcasmo esté quedando “suficientemente” claro, no quiero que nadie se confunda, y pueda llegar a buscar la película (como yo lo hice). Sí, reconozco que no fue un accidente, fue de forma premeditada, pero ya sabéis que mi mente está un poco enferma, así que espero que lo podáis entender.


¿Por donde iba? ¡Ah, sí! El final… el apogeo a tal disparate de película, llega cuando se organiza una gran fiesta en casa de uno de los chavales, que pretenden así ganar popularidad. Resulta que en mitad de la fiesta (ATENCIÓN A LA JUGADA), irrumpe repentinamente un grupo de ¡malvados motoristas mutantes!, que están totalmente indignados por no haber sido invitados a la fiesta, genial… Después para rematar la jugada, llega el hermano mayor del chaval, que es un cabrón, y que le encanta joder a su hermanito, y amenaza con contarle todo a sus padres, hasta que (REPIQUE DE TAMBORES) la chica con sus poderes cibernéticos le convierte en ¡un monstruo hecho de mierda! Asombroso…


Como podéis ver la película no tiene desperdicio alguno… a mí lo que me confunde de verdad, es que tras haberla visto, todavía no la he borrado de mi disco duro, y lo que aún es peor, seguramente termine por conservarla… ¿Debería preocuparme?

Para terminar deciros que aparecen un par de actores conocidos, cuando todavía eran unos jovencitos, concretamente Bill Paxton, y Robert Downey (que aquí por paradójico que resulte) aún no era JR.


En fin, un entrañable bodrio de los 80, haced caso al bueno del tío Nak, y no la veáis, que no os arrepentiréis por ello. Aun así, os resumo los tres mejores elementos del filme, por si a alguno aún le quedan ganas de verla (al fin y al cabo, sé que mi mente no es la única enferma).

1 - La protagonista, que es muy guapa, y tiene un cuerpazo


2 - El monstruo del final, que es una montaña de mierda parlante


3 - Los efectos especiales y la estética de película de los 80, que es lo único que a mi me gustó.


Sed felices, y para ver esto, mejor ved “Saber y ganar”, que seguro que os reiréis más con su famoso rap…

Alice in Wonderland 3D (2010)

¿Ha vuelto el mejor Tim Burton? Ese que nos mostró una fantasía sin igual en “Big Fish”, que nos fascinó con sus majestuosos diseños de personajes en “Bitelchus”, o que nos hizo reír con “Mars Attacks” (al menos a algunos, particularmente siempre he defendido esta película), o por el contrario estamos ante el Tim Burton de la infumable “Sweeney Todd”, o de la muy decepcionante “El planeta de los simios”.

En mi opinión estamos ante un Tim Burton a medio camino entre ambos, digamos que la mayor parte de la película el director intenta caminar hacia el sendero luminoso de la fuerza, pero en ocasiones siente la poderosa llamada del lado oscuro, por el que finalmente se deja seducir.

A lo mejor a estas alturas alguno pensará que se me ha ido la cabeza…en fin a lo que me refiero con el símil starwarsiano, es a que Burton presenta unas claras buenas intenciones en su película, y durante una gran parte del metraje consigue realizar un filme entretenido y que mantiene el interés durante su desarrollo, pero que no se muy bien porqué, termina dejándose llevar por las prisas y las facilidades, firmando un final tan decepcionante como absurdo.


Realmente a mí la película me ha gustado, pero por el contrario no me fascinado como lo han conseguido hacer trabajos anteriores de Burton. Hablando de lo puramente narrativo, la película presenta dos partes totalmente diferenciadas, y que cualitativamente distan mucho entre sí. Por un lado tenemos el mundo real de la historia (Londres y alrededores), y por otro lado el mundo fantástico del País de las maravillas. En mi opinión, casi todo lo que sucede en el mundo real es absurdo, y carente de interés, y es la parte que creo que lastra la película hasta el punto de mediocridad en el que yo la enmarcaría.


(INICIO SPOILER) Por ejemplo, ¿qué sentido tiene el flirteo del novio de la hermana de Alicia con otra chica? No aporta absolutamente nada a la historia, por no hablar del desenlace, que termina por romper totalmente el buen camino que el nudo se había encargado de construir hasta entonces, no le encuentro ningún sentido, ¿a qué vienen toda esa serie de revelaciones finales?

Está claro que tras su aventura, Alicia ha madurado, y es capaz de tomar decisiones con mayor seguridad, hasta ahí lo puedo entender, pero ¿de dónde cojones saca la información para decidir que es momento de abrir una nueva ruta comercial con China? Por no hablar del bailecito… que tan de moda parece haberse puesto (¿os acordáis de Peter Parker en Spiderman 3?), y que sinceramente me parece una estupidez cuando no viene a cuento, como es el caso, por mucho que el director sea Tim Burton, Sam Raimi, o Perico de Los Palotes.


Tampoco me convenció el absurdo lenguaje utilizado en la película, no se si es cuestión del doblaje en español (que tampoco me extrañaría), pero termina por resultar molesto, y creo que tampoco es necesario para la historia, ¿Por qué utiliza palabrejas como “gloricioso” en lugar de “glorioso”? (FIN SPOILER)


Ahora bien, si la película me ha gustado es por algo, y es por supuesto por el aspecto visual, que es el protagonista principal (por encima de Alicia o el sombrerero) de esa segunda parte del filme a la que me refería anteriormente. El País de las maravillas es absolutamente espectacular, es donde realmente se ve la mano de Burton, aunque en esta ocasión se presente más moderado que en filmes anteriores, perdiendo un poco esos elementos oscuros y góticos tan característicos en su obra.


Uno de los elementos que más me gustaron fue el nuevo diseño de los guardianes con forma de naipes, el séquito de la reina roja, que presentan un aspecto mucho más fiero y amenazante, y se comportan de un modo más militar. También es destacable el nivel de detalle que se llega a alcanzar en los escenarios, como por ejemplo los murciélagos que sujetan en vuelo constante una gran lámpara del palacio, y que prácticamente pasa desapercibido; me gusta mucho cuando en un filme has de fijarte para percibir ese tipo de detalles.


Sinceramente creo que Burton es un director al que no se le dan excesivamente bien las adaptaciones, sino que se desenvuelve mucho mejor cuando construye desde la nada, es un director que necesita una libertad creativa total, y en este caso, si bien ha reimaginado a su antojo muchos de los elementos del filme clásico, se echa de menos un poco más de la tenebrosa psique del director.


No es todo lo bueno que podría haber sido, pero no deja de ser un filme entretenido, al que si se le perdona el final, con un poco de condescendencia, se le puede calificar con una nota algo por encima del mero aprobado, sin olvidar que disfrutareis de lo lindo con el espectáculo visual que ofrece (al menos la versión en 3D).

The collector (2009)

Una aceptable película de terror, que realmente no aporta ninguna novedad al género, pero que durante la mayoría de minutos de metraje funciona bastante bien en cuanto a generadora de tensión. Además, viendo el nivel de muchas de las producciones de terror que aparecen hoy por hoy, ya es bastante pedir el que una película como ésta te deje un sabor de boca, no excesivamente bueno pero, como ya he dicho, al menos aceptable.

Hay que decir también, que cuando me dispuse a ver esta película, no tenía demasiadas expectativas puestas en ella, principalmente después de haber leído en su cartel promocional, que la película venía “avalada” por haber sido concebida por los mismos creadores de “Saw V” y “Saw VI”… me imagino que ya iréis entendiendo a lo que me refiero.


De lo que no cabe la menor duda, es que se nota la mano de sus mencionados creadores, ya que la película presenta unos altos índices de violencia, y muertes sádicas y en ocasiones algo rebuscadas, como en la saga “Saw”, con imágenes que a más de uno le pondrán los pelos de punta.


El planteamiento de la historia es uno de los puntos a favor de la película en mi opinión, por resultar medianamente original. La trama nos presenta a un joven ladrón, especialista en desvalijar cajas fuertes, que necesita dinero de forma urgente para poder hacer frente a una deuda contraída por su mujer, y que le pone en peligro tanto a ella como a la pequeña hija de ambos.


Por ello, una noche decide introducirse, de forma precipitada, en la casa que tenía pensado infiltrarse, aprovechando que los dueños van a ausentarse durante unos días. La sorpresa se produce, cuando una vez dentro de la casa, el protagonista descubre, que no se encuentra solo, sino que alguien más está en el interior.


Este alguien, es un despiadado y sanguinario asesino, cuya afición es coleccionar personas, por lo que el protagonista tendrá que pasar de saquear la casa, a luchar por su vida y tratar de salvar también la de los habitantes de la casa, retenidos y torturados por el misterioso asesino, que oculta su rostro tras una máscara.


Otro punto adecuado, es la fotografía de la película, que resulta variada y generalmente acertada, también recuerda en ese sentido a “Saw”, con unos ambientes teñidos en tonos fríos, que contribuyen a generar esa sensación de terror crudo y aséptico.


Como ya he dicho, se trata de una aceptable propuesta, de entre la multitud de bazofia que por desgracia podemos encontrar actualmente dentro del género de terror.

Pi (fe en el caos) (1998)

La verdad es que hacía bastantes años que llevaba queriendo ver esta película, pero se había convertido en una de esas obras huidizas, que por unos u otros motivos, nunca llegas a ver, pero hoy finalmente he procedido a visionarla, y puedo decir que tan sólo me arrepiento de una cosa: de no haberlo hecho antes.

Se trata de una película realmente interesante, impactante, y que visual y narrativamente cuenta con infinidad de elementos destacables, algunos de los cuales comentaré luego. Lo primero que considero necesario, es hablar brevemente sobre su director, Darren Aronofsky, el cual es afortunado por dos motivos, primero (en mi opinión) por contar con bastante talento para la dirección cinematográfica, y segundo por tener como pareja a la espectacular Rachel Weisz (esto es lo que yo suelo llamar “un tío con suerte”).


Lo cierto es que el bueno de Darren no se ha puesto, hoy por hoy, muchas veces tras las cámaras, pero la verdad es que las veces que lo ha hecho en su mayoría ha firmado trabajos muy interesantes, como esta “Pi”, “Réquiem por un sueño”, que es en mi opinión una obra contemporánea imprescindible, o la más reciente y también muy interesante “The Wrestler”, de la que otro día hablaré.

La película está filmada íntegramente en blanco y negro, algo que le otorga un matiz bastante especial debido a su temática, y que yo creo que es un acierto el que se adoptara dicha técnica, ya que considero que la hace más potente, visualmente hablando.


El argumento nos presenta a Maximilian Cohen, un tipo un tanto estrafalario, un matemático obsesionado totalmente por los números, y que llega a afirmar que “el universo está hecho de números”. Se trata de un hombre realmente inteligente, cuya motivación es encontrar un modelo de predicción sobre el funcionamiento de La Bolsa. El personaje, un tipo maniático y algo enajenado, sufre constantemente unas tremendas jaquecas y en ocasiones llega incluso a presenciar inquietantes alucinaciones.


Los problemas surgen, cuando dos grupos persiguen a Max para hacerse con el resultado de sus investigaciones, por un lado una compañía financiera, y por el otro un grupo de fanáticos religiosos judíos, cada uno de ellos con sus correspondientes intereses, y que harán todo lo posible para hacerse con tan codiciado descubrimiento. Religión y poderes económicos se ven representados en el filme mediante estos dos grupos, se trata en mi opinión de una alegoría a los dos sectores que principalmente tratan de condicionar tanto el conocimiento de Max en la ficción, como nuestras vidas en la realidad.


El filme presenta un aspecto negativo, y es que creo que puede llegar a confundir al espectador la constante cantidad de información que se presenta sobre distintos motivos y procedimientos matemáticos, y que en realidad no guardan relación alguna con el argumento, sino que simplemente se insertan en la película para otorgarle una sensación de tecnicismo, pero que nada aportan realmente a la trama, es mero maquillaje discursivo, una capa superficial que en esta ocasión no embellece, sino que estropea en cierta (aunque pequeña) medida la naturalidad del filme.


En cuanto a los aspectos más positivos, y con los que me quedo, destacaría su soberbio montaje, especialmente me gustan los planos muy rápidos que sirven para describir una acción determinada que se repite en numerosas ocasiones a lo largo de la película (como cerrar la puerta con multitud de cerrojos, o cuando el protagonista toma pastillas), este tipo de montaje resulta sumamente descriptivo y de gran ayuda para representar las características del personaje.


También encontramos movimientos de cámara muy diversos y atrevidos, que otorgan gran dinamismo a la acción, así como las angulaciones que la cámara adopta resultan muy interesantes. Otro punto fuerte, es el que la sensación de paranoia del protagonista esté perfectamente descrita, resulta muy creíble; eso ayuda mucho a comprender el funcionamiento de la película, y a entender la idea que se está buscando transmitir.


Realmente podemos decir que la película resultó ser sumamente inspiradora para la posterior “Réquiem por un sueño”, en la que encontramos repetidas todas las técnicas que acabo de mencionar. Por ello, si visionáis las dos películas, os daréis cuenta rápidamente de que existen infinidad de similitudes técnicas y narrativas entre ambas, incluso algunos pasajes de la banda sonora de ésta, recuerdan descaradamente a otros de “Réquiem por un sueño”.


Creo que “Pi” es un filme recomendable, quizá ya no tanto en cuanto a su guión, sino más bien en cuanto a que se trata de un buen ejemplo para aprender como narrar con el montaje y con la grabación, más que con la propia palabra.

Grizzly Man (2005)

El protagonista de este documental, dirigido por Werner Herzog, es Timothy Treadwell, un activista ecologista, que durante trece años convivió con los feroces osos grizzly en la reserva natural del Parque Nacional de Katmai, en Alaska. A su vez documentaba con su cámara toda su estancia en el parque, con la finalidad de proteger a los osos, principalmente mediante la concienciación social, ya que otra de sus actividades era la educación en los colegios, mostrando a los niños a los osos en su hábitat natural.

El documental parte de la figura de su personaje para presentarnos lo que se dedicaba a hacer durante su convivencia con los osos. Para ello se sirve de diversas técnicas y materiales. En primer lugar cuenta con todo el material de archivo que el propio Timothy filmó durante todos los años en los que visitó el parque hasta su muerte, antes de ser atacado por uno de sus amados osos. Es ese material el que resulta realmente impactante, ya que se muestra una imagen de los osos nunca antes vista, ya que él se acercaba hasta los animales más de lo que otros pudieran hacerlo. Sin embargo no es este un documental de naturaleza que hable sobre los osos, sino sobre la figura de Timothy y su actividad en el parque, planteando a la vez la pregunta de hasta que punto era correcto lo que él hacía.


Otro recurso utilizado, es el propio material original obtenido durante la realización del documental, así como diversos tipos de imágenes de archivo (tanto fotografías como otros vídeos) utilizados especialmente para presentar a la figura de Timothy, para enseñarnos quien era él en realidad, entrevistas, etc. En el apartado de las entrevistas encontramos tanto una entrevista de archivo al mismo Timothy como otras muchas realizadas a amigos y testigos de los acontecimientos, lo que refuerza la dualidad simpatía-oposición con la que contaban sus actividades.


El documental no sigue una estructura cronológica, sino que alterna continuamente diferentes espacios, y salta constantemente del “presente” del documental al “pasado” de los archivos de Timothy, se entrelazan las declaraciones de los entrevistados con los testimonios de Timothy durante sus filmaciones, etc. La finalidad del documental es presentarnos al personaje, mostrándonos en cierto modo las dos caras de la misma moneda en cuanto a su trabajo, la positiva y la negativa, si bien la posición del documental se aproxima más a la primera.


Para ello se incluyen declaraciones tanto favorables como negativas, además el propio narrador del documental en ocasiones lanza algunas dudas acerca de la idealidad sobre algunos aspectos de la actividad que Timothy desarrollaba. Al final es el espectador, quien con la información con la que cuenta debe posicionarse en un lado u otro y sacar sus propias conclusiones de lo que se le presenta, algo en lo que lógicamente influirá su mentalidad y sus posibles experiencias personales al respecto.


La información se presenta a través de un narrador externo, que es quien conduce y da sentido a todo el material que se muestra, esta figura es especialmente relevante en lo que hemos denominado el “presente” del documental, ya que en el “pasado” de las grabaciones de Timothy es él mismo quien toma el rumbo de la narración mediante sus declaraciones ante la cámara.

Podemos decir que en dicho material Timothy se encargaba de todo el proceso de documentación, ejercía las funciones de director, de cámara, y más que de presentador podríamos decir que de actor en su propia película, ya que en mi opinión cuando aparece ante la cámara ejerce las funciones de personaje, un personaje creado por él mismo, a su imagen y semejanza.


En ese material podemos encontrar gran variedad en cuanto a tipos de planos, desde grandes planos abiertos y estáticos en la que podemos observar la grandeza y la belleza del lugar en el que se desarrollan los hechos, hasta planos mucho más cerrados con cámara en mano cuando la ocasión lo requiere, como por ejemplo un seguimiento a un oso desde una posición complicada.

Otro aspecto con el que juega mucho el documental es con las mencionadas declaraciones de Timothy a su cámara, esto se pone en evidencia principalmente en el principio, cuando se muestra a Timothy hablando de su misión de protección, donde declara que sabe que su misión es peligrosa, pero que también sabe que no va a morir bajo las garras de un oso, algo que evidentemente poco después podemos comprobar que no fue así, y que el documental se encarga de resaltar en todo momento.

Una interesante propuesta documental.